
Los buenos magos no usan compinches. Compadres, socios ilícitos y demás nombres son los que se les da al compañero que ayuda al mago sin que nadie lo sepa.
Primero voy a mostrar la definición del compinche de magos: se dice de un compañero o complice de otro, especialmente en actos delictivos.
Los magos llamamos compinche a varios tipos de personas que están asociadas con el mago.
Esta el compinche improvisado:
es al que se le dice en un momento dado, “yo te voy a decir que pienses en una ciudad y tu me vas a decir Hong Kong”.
Está el mago que hace lo que se llama “pre-show”. El “pre-show” consta en que el mago va por el publico haciendo juegos, como por ejemplo de cartas, y en un momento dado a un espectador o espectadora, al adivinarle una carta después de hacerle un juego le dice “después, cuando yo este en el escenario, te preguntare por esta carta”.
El compinche del mago que se hace pasar por espectador,
conoce todos los trucos y ayuda al mago a suplir sus carencias.
Desgraciadamente para los magos que no utilizamos compinches, lo que vemos últimamente en televisión de magos que todos conocemos, no nos hace bien. Tampoco les hace bien a ellos (a los que usan estos medios de discutible moral) por que cuando se ven en una situación ajena, que no dominan, no pueden hacer lo que mostraron en la televisión o en su teatro en Gran Vía.
Este tema es muy hablado en la comunidad mágica, incluso en el podcast de uno de nuestros profesores en “The Magic Factory”, Pipo Villanueva, trata este tema con su compañero Luis Otero. Y ademas trata el tema de los trucajes en determinados artilugios y barajas. Muy recomendable el podcast por cierto, del que rescato una frase de Gabi Pareras que es la siguiente: “ No trates de suplir con cosas trucadas, deficiencias técnicas”.
Reflexión:
Esta reflexión, es mía, seguramente formada de cosas que he leído y he oÍdo de las personas de las que he aprendido magia: “Para saber si esta bien o no utilizar compinches, piensa en un show de hipnosis o telepatía en el que al final supieras que todos los que se han desmayado, o a los que les han transmitido información de manera “cerebral” que tu pensabas que eran parte del publico como tú, fueran personas contratadas. O un músico que a ti te encante, saliera a la luz que él ni cantaba, ni tocaba sus instrumentos, como sucedía con Mini Vanilli.” Esto me parece lo mismo que llamar a personas al escenario para que floten en el aire, cuando en realidad son personas de tu staff y están contratadas. Esta muy feo.
Por eso, los magos que venimos a estudiar magia a “The Magic Factory” no utilizamos estos trucos feos. Venimos a nuestra escuela de magia a aprender como poder hacer milagros sin necesidad de usar compinches.